¿Cuál es la motivación?
“Esta campaña surge porque en el último año hemos recibido muchas denuncias acerca de loteos irregulares”.
¿Qué son estos loteos «brujos» o irregulares?
“Se trata de parcelaciones de un terreno madre en el que se divide sin seguir la ley, es decir, obviando requisitos como que el predio no sea inundable, condiciones de urbanización y anchos mínimos de calles, entre otros. Por ello, no se vende la propiedad con título de dominio y rol propio. Como no están divididos legalmente, estos lotes no tienen un rol propio, por lo cual, se venden derechos de la propiedad. Es decir, un porcentaje no espacializable”.
¿Cuál es la diferencia con un loteo regularizado?
“En este caso, cada lote tiene un rol, una inscripción en el Conservador de Bienes Raíces y deslindes. Y todo el Estado reconoce al propietario. A diferencia del loteo irregular, donde no hay nada inscrito”.
¿Qué pasa con quien incurre en este loteo irregular?
“Hay que dejar en claro que lotear de manera irregular o fraudulenta es un delito en Chile. Y lo comete el que divide sin seguir la norma, no el que compra. Nosotros en el Ministerio de Bienes Nacionales hacemos las denuncias a la fiscalía y existen casos donde se ha decretado prisión para personas que lamentablemente juegan con el sueño de la casa propia”.
¿Qué ocurre con quien compra?
“La consecuencia es que nunca se va a poder regularizar la propiedad con un rol propio del terreno, por lo cual, no será reconocido. No importa si pagó por el terreno. Además, nunca tendrá permiso de edificación o recepción conforme de obra por parte de la municipalidad. Y nunca podrá obtener un crédito hipotecario. Otra consecuencia es que el bien no se puede heredar. Es decir, al final, es un enredo que no da tranquilidad”.
¿Qué ocurre cuando estas personas llegan a Bienes Nacionales?
“Nosotros les explicamos que es ilegal regularizar. Nos dicen que no hay voluntad, pero no es eso. Se trata de cumplir con requisitos que fija la norma. En Chile hemos tenido personas fallecidas por vivir en lugares donde existe riesgo evidente. Ocurre que estas personas le dicen a los compradores que en cinco años más puede regularizar en Bienes Nacionales, pero se debe cumplir con requisitos obligatorios”.
¿En qué consiste la campaña preventiva?
“Estamos haciendo entrega de un manual con un checklist muy simple para que las personas que compren un terreno en loteo lo puedan utilizar. Allí están todos los documentos y requisitos que se necesitan parar regularizar ante Bienes Nacionales. Por ello, les pedimos que vean y comprueben si lo que están comprando es una propiedad saneada, tanto en lo urbano y rural”.
¿Cuál es la realidad del Maule?
“En esta región es donde más hemos detectado loteos irregulares. Por ello, estamos comenzando la campaña nacional en esta zona. Nuestro Seremi, César Concha, lo ha informado así y estamos actuando ante esta preocupante situación”.
¿Cuál es la finalidad?
“Queremos que las personas compren informadas. Es decir, si va a comprar derechos, que sepa que no va a obtener el título de dominio. Pero si cumple las condiciones de un loteo regular, no tendrá problemas. En Chile se puede lotear, pero cumpliendo lo que dice la ley. Quienes no lo hacen así, juegan con las personas y sus anhelos”.
¿Cuál es la situación de fondo?
“Ocurre que, en los últimos años, muchas personas están poniendo en valor la ruralidad, para alejarse de los tacos y la problemática de las ciudades. Se busca tranquilidad y seguridad. Pero también se están ocupando suelos fértiles para la agricultura”.
¿Qué otra problemática?
“Las personas entienden por una cuestión cultural que se adquiere un bien tras acudir a la Notaría. Pero no es así, porque la única institución que certifica el dominio son los Conservadores de Bienes Raíces que es donde se hace la inscripción. En la Notaría se sella la compra y venta, pero eso no certifica la propiedad”.
¿Qué casos de loteos irregulares le han llamado la atención?
“Son esos terrenos que están en una zona geográfica que tiene riesgo para la vida, por ejemplo, las riberas de los ríos. O en lugares donde está proyectado que pase un camino. O también donde hay riesgo sísmico o en zonas industriales, donde no puede haber viviendas. En estos casos presentamos las querellas a través del Consejo de Defensa del Estado”.
(Por Hernán Espinoza con fotografía y video de Luis Casanova)