Si es por trayectoria, el ganador debió ser Bernardo González Kopmann. La letra chica, sin embargo, sacó a relucir un criterio de “descentralización” que favorece a cualquier comuna que no sea Talca. En definitiva, el reconocimiento a la trayectoria en Arte Literario de los Premios Regionales de Artes, Culturas y Patrimonio 2022, fue para el poeta linarense Luis Lagos Leiva. Entonces, ardió Troya (por Rodrigo Contreras Vergara)
Primero, el poeta Rodrigo Jara Reyes me hace llegar un texto sobre la poesía de Bernardo González Koppmann, quien de manera regular está comentando libros en Diario Talca, especialmente de Helena Ediciones, una pequeña editorial talquina que apoya a autores locales.
Digamos que González Koppmann no es solo un reconocido poeta. También es profesor de historia, activo integrante del Colegio de Profesores y un disciplinado militante del Partido Comunista. Ah, también se define como creyente y humanista. No hay contradicción, asegura el poeta, entre ser comunista y creyente.
Es más, a nadie debería importarle su militancia, pero hay quienes -aún en el contexto de esta crónica que apunta, cree uno ingenuamente, a lo literario- le dan un valor relevante. Ya veremos.
El asunto es que después del texto de Rodrigo Jara Reyes, me llega un correo de Helena Ediciones con una crónica sobre González Koppmann. Ahí comencé a entender un poco el asunto. Me explicaban que habían postulado a Bernardo a los Premios Regionales de Artes, Culturas y Patrimonio 2022, en la modalidad reconocimiento a la trayectoria en Arte Literario. Bueno…y quién mejor que González Koppmann si es cuestión de trayectoria, pensaron en la editorial.
Y resulta que no ganó. El estímulo fue para el poeta linarense Luis Lagos Leiva. La ceremonia de premiación se realizó recientemente y Bernardo González Koppmann, a quien le confirieron el premio de consuelo de una mención honrosa, optó por no asistir.
La polémica estaba servida. En el texto enviado por Helena Ediciones se detallaba la extensa e indiscutible trayectoria del poeta, mucho más evidente que la del ganador, sin desmerecer a Lagos Leiva.
Yo que soy periodista, no poeta, ni Dios lo quiera, conozco la trayectoria de González Koppmann, sus libros, sus artículos, sus premios y reconocimientos. Están ahí, es cosa de preguntarle al señor Google.
EL ACTA RESPONDE
La editorial le solicitó el acta del premio al Consejo de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. Junto con enviarles lo solicitado, la autoridad explicó que la definición del premio para la modalidad reconocimiento a la trayectoria en Arte Literario, “es resultado del puntaje obtenido en los tres criterios de evaluación establecidos” en las bases de la convocatoria.
Tanto González Koppmann como Lagos Leiva, los únicos postulantes al premio en dicha categoría, igualaron en los dos primeros criterios, debiendo definirse todo en el tercero que pondera la “descentralización y desconcentración territorial, considerando la presencia temática y de instalación en comunas distintas de la capital regional”. En palabras simples, se puntuaba mejor a los postulantes que no pertenecieran a Talca. Entonces, entre un linarense y un talquino, por más que González Koppmann tuviera mejor trayectoria que Lagos Leiva, ganó la discriminación positiva.
En su escrito, Jara Reyes ubica a Bernardo González Koppmann “como un poeta esencial (…) el más importante de los últimos treinta años en nuestra región”. Su poesía, argumenta, “constituye un portal de rescate y reconstitución de lo fundamental de la cultura, la historia y el modo de ser del Maule profundo”. Y para que no queden dudas, remata: “…la cantidad, calidad de su trabajo y los diferentes registros en los que incursiona su poética, lo instalan como un poeta esencial”. Uf, contundente el comentario de Jara Reyes.
ANTICOMUNISMO
Aquí entra en escena otra fuente. Hugo Pizarro Gómez, profesor, articulista y amigo de González Koppmann, suma a la discusión la veta política. Sorprendido por el resultado del premio, se atreve a hablar de una “contradicción evidente”, y de una resolución “manifiestamente anómala” e “injusta”.
“Por qué no le fue otorgado el premio al poeta talquino”, se pregunta Hugo Pizarro. “La respuesta se nos aparece como una deducción simple y lógica: Por su reconocida militancia comunista”, concluye enfático. Y va más allá. Asegura que “desde hace bastante tiempo, existen prácticas anticomunistas al interior del Consejo de la Cultura del Maule, específicamente por parte de algunas burócratas incrustadas en los ambiguos días de la Concertación”. Prácticas que, insiste Pizarro, denunció en su momento González Koppmann.
Usted, lector atento, seguramente ya ató los cabos. Pero si no lo ha hecho, Hugo Pizarro anuda todo: “¿No será esta maniobra -el hecho de no otorgarle el reconocimiento a su vasta y dilatada trayectoria literaria- una pasada de cuentas de dichas funcionarias?”.
Ya les decía que ardió Troya.
EVIDENTE CONTRADICCIÓN
Claro, se pensó que por tratarse de un reconocimiento a la trayectoria en Arte Literario, González Koppmann era el candidato ideal. Pero, nadie leyó la letra chica.
Algo está fallando en el proceso si se cae en tan evidente contradicción. O se reconoce la trayectoria a secas, sin criterios interpretables, o se le cambia el nombre al premio, algo así como “reconocimiento a la trayectoria, siempre y cuando el postulante no sea talquino”.
Conozco a González Koppmann y puede que haya hecho una mueca al conocer el resultado del premio, pero estoy seguro que ya se le pasó. Debe estar pensando en el partido (no en la final del mundial), en su próximo libro, en la jubilación, por último en Chonchi. No se haga mala sangre poeta, la trayectoria solo sirve para las necrológicas. Y a usted le queda cuerda para rato.