¿Cuál es el resultado?
La confianza empresarial en el Maule se mantuvo en terreno pesimista durante el primer trimestre de 2023, al ubicarse en los dos niveles inferiores del Índice de Confianza Empresarial del Maule (ICE Maule), elaborado por Facultad de Administración y Negocios de la Universidad Autónoma de Chile en Talca, en conjunto con la Asociación de Industriales del Centro (ASICENT).
¿Qué dijo un economista de la U. Autónoma?
Para el Vicedecano (I) de la Facultad, Tomás Sepúlveda, los niveles observados en enero, febrero y marzo de 2023 son sólo comparables con los registrados a mediados de 2020, en período de pandemia de COVID-19. No obstante, esto no difiere significativamente de lo apreciado durante 2022, año en el que la confianza también se mantuvo en terreno pesimista.
¿Como ha evolucionado el índice?
A juicio de Sepúlveda es preciso analizar que, desde el segundo semestre del 2021, cuando la confianza registró niveles leves de optimismo, los índices han mostrado una clara trayectoria hacia el pesimismo. El patrón es similar en los sectores productivos, con los matices propios de cada uno de estos, los mercados a los que se dirigen y el tamaño de las empresas, sumado a los vaivenes y oscilaciones estacionales.
¿Cuáles fueron sus palabras?
“Si observamos trayectorias basadas en promedios móviles trimestrales, podemos notar cómo el sector Construcción, seguido de Comercio, han mostrado una caída más acentuada hacia terrenos pesimistas, lo cual nos muestra que la realidad regional no difiere significativamente de la nacional. En otro extremo, es decir con una trayectoria hacia el pesimismo menos acentuada, se encuentra el sector Financiero. Siguiendo el mismo camino, pero ubicados entre ambos grupos, los sectores Industrial y Agrícola, fueron paulatinamente retrocediendo en su confianza”, detalló.
¿Cuáles son las causas de esta percepción empresarial?
El ICE Maule del segundo semestre de 2022 mostró que las percepciones “Posición de inventarios” y “Precio de los insumos”, fueron dos condicionantes para marcar una trayectoria hacia terrenos no favorables. No obstante, las percepciones relativas a la “Situación Económica” y la “Demanda Nacional”, sumado al mayor pesimismo sobre la “Contratación de trabajadores”, principalmente en los sectores Agrícola y Construcción, han sido las razones que con mayor fuerza han explicado el comportamiento del primer trimestre 2023.
¿Qué ocurre con el sector de la construcción?
“Los niveles de pesimismo mostrados en el sector Construcción, cuyas percepciones respecto a la `Situación del negocio´, `Demanda nacional´ y `Contratación de trabajadores´, se ubican muy por bajo el resto de los sectores, salvo quizás el Comercio, respecto a la `Contratación de trabajadores”, detalló Sepúlveda.