¿A qué se debe su presencia en Talca?
“El Banco Central emite cuatro informes al año de política monetaria, con un análisis de qué está pasando con la macroeconomía en Chile y el mundo, además de formular proyecciones y delinear estrategias, junto a visualizar los riesgos que vemos para la economía.
Por ello, es fundamental para nosotros poder difundir estos antecedentes y datos con distintos actores, a nivel nacional y regional. Por ello, hacemos un despliegue IPOM que nos lleva a regiones. Nos interesa difundir el informe y recoger las opiniones. Eso nutre mucho nuestro análisis para formarnos una opinión respecto a lo que ocurre en todo Chile.
¿Este diálogo con actores y gremios en regiones se lleva al Consejo del Banco Central para retroalimentar la política monetaria?
“Exactamente. Es parte de las conversaciones habituales que tenemos los consejeros, donde vamos atando cabos de lo que nos dicen las estadísticas y cómo ello se plasma en terreno”.
¿Y cuáles son las principales conclusiones en materia de crecimiento para la economía chilena?
“Lo que vimos en el informe es que cerramos un año 2024 algo más dinámico de lo que pensábamos. Esto en parte influido por el sector exportador de la economía y un impacto importante del turismo. Hay algunos fenómenos que son puntuales, porque las cifras de embarques frutícolas que tuvimos en 2024 probablemente no se repitan más adelante. Pero hay otras cosas que serán más persistentes”.
Chile creció un 2,6% en 2024. ¿Cuál es la estimación para 2025?
“Nuestro informe de diciembre de 2024 planteó que la economía para este año iba a crecer entre 1,5% y 2,5%, pero ahora revisamos al alza este rango a 1,75% y 2,75%, porque el inicio de año estuvo mejor y porque vemos algunos factores que nos van a ayudar en la demanda interna que es el consumo y la inversión, los cuales podrán tener un moderado repunte este 2025”.
¿Y cómo se evalúa esta proyección porque un 2,75% es muy bajo en relación al crecimiento antes de la pandemia?
“Esa es una discusión larga porque lo que llamamos como el crecimiento o PIB tendencial de la economía chilena lo estimamos en torno al 2%. Esa cifra antes era de un 4% e incluso más. Pero ha ido cayendo con el tiempo, porque la productividad se ha ido estancando, la inversión no ha tenido el despliegue esperado y se suma el menor ritmo de crecimiento de la población. Por lo mismo, las proyecciones de crecimiento van a estar en torno a esa cifra”.
¿Qué va a pasar con la inflación?
“La inflación se va a mantener relativamente alta durante estos primeros meses del año con un 4,5% a 5%, pero en la segunda parte del año vamos a tener un descenso muy importante porque se van a empezar a ver los efectos base de comparación. A la mitad del año pasado subieron las tarifas eléctricas que tuvieron un impacto muy importante en la inflación. Eso lo habíamos advertido y así se dio.
Y lo que va a pasar este año es que en el segundo semestre esas bases de comparación van a ser menos exigentes y, por ello, la inflación tendrá un descenso, cerrando por debajo del 4%. Y luego, durante el primer trimestre del 2025 debiésemos estar más cerca del 3% que es nuestra meta”.
¿Y qué pasará con las tasas de interés que fija el Banco Central?
“Respecto a la política monetaria hemos hecho un trayecto de reducciones de tasas sistemático desde hace un tiempo, llegando al 5%. Ahora bien, estimamos que la tasa de interés neutral está en un rango de 3,5% y 4%. Por lo tanto, estamos justo un poquito por arriba de ese rango.
Pensamos que cuando la inflación tenga un camino más claro hacia el 3%, la tasa de política monetaria debiese moverse hacia ese rango de 3,5% a 4%. Ahora respecto a cuándo eso va a ocurrir va a depender de cómo vayamos viendo la situación.
El mensaje de este IPOM es que debemos tener mucha cautela porque lo cierto es que todavía tenemos riesgos de inflación, en un contexto internacional donde aparecen amenazas que pueden afectar los precios. Pensamos que hay que mantener cautela y, por ello, primero hay que asegurarse que la inflación va a tender al 3% antes de ir hacia una trayectoria más neutral de la tasa de interés”
¿Cuánto aporta la agricultura al crecimiento de Chile?
“Lo que pasó con el agro es que lo favorecieron factores climáticos puntuales y el contexto del tipo de cambio, con un peso que está relativamente débil, lo cual hace competitivas nuestras exportaciones, lo cual tiene que ver con algo más cíclico de la economía”.
¿Entonces la recomendación es seguir exportando?
“No puedo hacer proyecciones sectoriales, pero nuestra visión es que el crecimiento de la economía mundial –lo cual incide en la demanda, especialmente, de productos agrícolas- lo hemos ajustado a la baja. Pensamos que la guerra comercial y las tensiones geopolíticas que vive el mundo están generando incertidumbre. Pero, por ahora, no tendrían un impacto tan relevante en el crecimiento”.
¿Cuál es la visión de lo que ocurre fuera de nuestras fronteras?
“El mundo está bastante más incierto por las nuevas políticas comerciales de Estados Unidos y eso puede tener un efecto en el crecimiento global. Por ahora, estimamos que el efecto será acotado, pero se levantan riesgos importantes”.
¿Qué pasará con China y su capacidad importadora?
“China cerró el 2024 con bastante dinamismo y comenzó igual este año. Ahora, las posibilidades de recesión en Estados Unidos han aumentado y ese es un escenario de riesgo que debemos tener en cuenta”.
¿Las políticas proteccionistas y arancelarias de Donald Trump nos tendrán sin dormir en los cuatro años de su mandato?
“Es difícil opinar porque nadie tiene muy claro qué va a pasar. Pero la incertidumbre ha subido y eso es muy evidente. Así lo señalan distintos indicadores. Y la propia incertidumbre puede tener efectos”.
Pero antes era la guerra y ahora la política…
“Son temas geopolíticos que han ampliado. Ya no es el conflicto entre Rusia y Ucrania, sino que se ha ampliado a otras regiones del mundo”.
¿El cobre chileno seguirá con buenas ventas gracias a China?
“China ha implementado una serie de políticas para darle más dinamismo a su demanda interna y eso significa más demanda por cobre. Vemos que las transiciones energéticas hacia una economía más sustentable han seguido su curso, con el tema de la electromovilidad. Son todos temas que le dan sustento al precio del cobre. Hay razones más de fondo que le dan sustento a su valor, por lo mismo, mantenemos nuestra visión de un precio a largo plazo en torno a 4,3 dólares la libra”.
¿Cuál es su mensaje para los actores de la economía en la región del Maule?
“Como Banco Central estamos muy preocupados de generar estabilidad macroeconómica. Eso es una condición muy importante, especialmente, en un contexto internacional más incierto, con una serie de riesgos. El aporte que podemos hacer como institución es generar estabilidad, lo cual es muy importante para tener certezas y certidumbre y que eso pueda transformarse en mayor confianza para llevar adelante proyectos de inversión”.