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Avisaje estatal en los medios de comunicación

El 21 de noviembre Chile vivirá un nuevo proceso eleccionario para el período 2022/2026. Cada conglomerado político se apresta a comenzar las campañas políticas donde darán a conocer sus propuestas programáticas. Siete son las figuras que esperan ganar esta elección, Boric, Kast, Provoste, Sichel, Artés, Enríquez Ominami y Parisi, uno de ellos o ella ingresará a la Moneda como el nuevo presidente o presidenta de Chile. Si hubiese segunda vuelta ésta se realizará el 19 de diciembre de 2021.

Un tema que vuelve al debate en estos días es el avisaje estatal en los medios de comunicación. ¿Cómo se reparten estas cifras cuantiosas y cuáles son los criterios para acceder a estos montos? Cabe señalar que El Servel ha desembolsado $6.246.034.956 en la cancelación de difusión y publicidad, llamando la atención, primeramente, que no han existido licitaciones abiertas y participativas para acceder a estos beneficios, más bien son designaciones a dedo, sin postulaciones previas.

El 22 de septiembre se da inicio al período de propaganda, tanto para las elecciones presidenciales, como parlamentarias y de CORE. Bajo este escenario vuelve a tener relevancia este tema, ya que organismos como El Consejo para la Transparencia (CPLT) ha dado la voz de alerta, especialmente hace un llamado al Estado para que tome cartas en el asunto y de cierta forma se haga cargo de todas las deficiencias que se observan en este proceso de avisajes. Uno de los asuntos centrales es que se cumpla con el objetivo de informar a la ciudadanía de todo el proceso eleccionario, utilizando otros medios informativos y no necesariamente concentrar la información en un solo medio.

Otra de las cuestiones que está al margen de estas políticas son las regiones, la ley contempla que a lo menos el 40% debe estar destinado a los medios de comunicación con presencia local, cuestión que en la práctica tampoco se da, ya que la mayoría del presupuesto se concentra en medios como El Mercurio y sus filiales. Obviando otros medios de comunicación, que incluso pueden ser mucho más baratos, como por ejemplo los medios digitales. Esto significa que no solamente estamos hablando de la concentración de los recursos en los medios de comunicación más grandes, sino que tampoco se ha dado cumplimiento a la entrega de estos recursos a los medios regionales, un hecho que claramente iría en la dirección de democratizar estos procedimientos.

Es importante hacer un llamado de atención sobre este tema porque la concentración de la información tiene claramente una intencionalidad política, ya que a través de la cancelación de estos avisajes se reciben millonarias cifras, que podría incluso servir para dar curso a  proyectos comunicaciones que conciten la línea editorial de estos medios.  Es importante preguntarse por qué el Servel paga estas millonarias cifras, si  las y los ciudadanos generalmente revisan en las páginas del Servel esta información, cuál es el sentido de que sean publicados por la prensa escrita. Durante las próximas semanas estaremos ad portas de nuevas publicaciones, las cuales se harán en el mes de octubre y que contemplaría las nóminas de vocales, locales de votación, miembros de colegios escrutadores, delegados y recintos, entre otros.

Sería muy bueno para el país que el Servel despeje estas dudas, especialmente ahora que comenzamos a dar curso a un nuevo proceso eleccionario que amerita volver a construir las confianzas entre los chilenos y chilenas.

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