¿Cuál es el contexto?
Luego de los tres casos recientes de funcionarios de Carabineros asesinados producto de ataques con armas de fuego, ocurridos en las regiones de Biobío, Valparaíso y Santiago, en Talca se anunciaron cambios en los protocolos operativos de la policía uniformada, buscando que los policías tengan más seguridad al momento de intervenir en casos de delitos violentos.
¿Cuál fue el anuncio?
Así lo anunció el Prefecto de Carabineros de Talca, Juan Ulloa, al señalar que «el carabinero debe protegerse y tener la precaución. Nuestro proceder va a tener que cambiar. Vamos a tener que volver a antaño, para que el carabinero tenga un parapeto tras el cual esté protegido. Es decir, uno de los carabineros tendrá que controlar y el otro va a tener que estar con su arma desenfundada».
¿Se infringe alguna ley actuando de esa manera?
«No se incurre en ninguna falta o delito. Lo primero que se debe proteger es al carabinero. Para proteger a la comunidad, el propio carabinero debe estar igualmente protegido. Y la orden que voy a dar es que cuando tengamos controles, el carabinero debe estar atento, solamente para cuidar al que esté controlando», afirmó el jefe policial.
¿Qué se espera de la reacción de las personas?
«Ojalá la gente no se ofenda y no asuste. El que nada hace, nada teme. Peo eso es para proteger a la comunidad. No vamos a hacer nada indebido. Y si alguien incurre en ello, se va de baja y preso. Pero nosotros estamos para proteger a la comunidad», comentó.
¿Desde cuándo estará vigente este nuevo protocolo?
«A contar de hoy es la instrucción que le di a nuestros carabineros. Yo hablé con nuestro departamento jurídico. Nosotros tenemos un arma institucional y solo incurrimos en falta o delito cuando se hace uso indebido del dispar. Pero yo tengo que tener al carabinero que esté atento, que esté protegido y si el arma la tiene, no es para pasearla. Yo no quiero tener carabineros fallecidos en en la zona», comentó.
¿En la práctica cómo va a funcionar?
«Cuando se realicen controles de tránsito van a haber como mínimo tres carabineros, todos con cascos y chalecos antibala. Insisto en que nadie tiene que ofenderse, porque el uso de estos implementos es un resguardo y una seguridad para el carabinero y para todas las personas. Siempre tiene que haber cobertura para que ojalá sea siempre superior la fuerza de los carabineros que los delincuentes, en cantidad de personal y en reacción», subrayó el prefecto Ulloa.