¿Cuál fue el anuncio?
El ministro de Hacienda, Mario Marcel, dio cuenta de los beneficios que contempla la recientemente publicada Ley 21.755 de Simplificación Regulatoria y Promoción de la Actividad Económica.
¿Cuál es la novedad?
La legislación -que fue publicada el 11 de julio pasado- establece, en forma excepcional, que se extiende la vigencia de las patentes provisorias que hubieran vencido durante el proceso de alerta sanitaria producto de la enfermedad Covid-19, con plazos que prorrogan desde el 30 de septiembre de 2025 hasta diciembre de 2026, dependiendo de su anterior vencimiento.
¿Qué explicó el ministro de Hacienda?
Marcel sostuvo que la ley contempla dos normas que “permiten extender o prorrogar patentes que, por un lado, vencían simultáneamente en septiembre del 2024, y por otro, la posibilidad de tener una prórroga automática por dos años para patentes provisorias».
«Esto se incorporó a este proyecto de ley a partir de un planteamiento que nos hizo la alcaldesa Delfino hace algún tiempo y, por lo tanto, refleja la colaboración entre distintos niveles de Gobierno y autoridades para facilitar la vida a las empresas y a los pequeños empresarios que están desarrollando sus proyectos”, manifestó.
¿Cuál es la expectativa?
“Hablamos de ruta del emprendimiento porque busca darle un espacio a empresas que están recién partiendo como microempresas con tal de que tengan la posibilidad de crecer y pasar a una categoría de empresa mayor, sin pagar los costos que hoy día significa por la manera en que está estructurado el sistema tributario. Tenemos varias medidas que van en la línea de promover y facilitar el emprendimiento”, sostuvo Marcel.
“Muchas veces cuando hablamos de inversión y crecimiento parece que hablamos solo de empresas grandes, pero en Chile hay un número muy grande de empresas de menor tamaño que invierten, emplean, producen y, por lo tanto, contribuyen a ese crecimiento de la economía”, comentó el ministro.
¿Cuál es la finalidad?
Esta Ley de Simplificación Regulatoria fomenta el emprendimiento y ofrece tranquilidad la micro, pequeña y mediana empresa que, por diversas razones (incluida su complejidad y costo) no había podido regularizar sus patentes.
Dicha regularización permite que las empresas cuyas patentes provisorias terminan no deban clausurar, y a los municipios recuperar esta contribución para ingresos propios municipales, con un claro impacto positivo en el empleo.