A la edad de 14 años, comenzó a escribir su currículum en el ámbito político y de trabajo territorial. No fue la historia familiar, ni un tipo de herencia de partes de sus padres, la que lo acercó a esas lides a este nacido y criado en Talca. Más bien, sus pasos fueron guiados por su hermano Gerardo -hoy director regional de Sercotec- al que considera como “su compañero de causa”, y con quien comparte el interés por la actividad pública.
Desde ese momento, su transitar ha estado marcado por el desempeño en temas de voluntariado, organizaciones sociales y estudiantiles. Esto último lo llevó a convertirse en presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Talca, asumiendo además tareas de dirigente en la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech).
Hoy, con sus 27 años, Erwin Castillo Arancibia, de profesión abogado, será el concejal más joven en asumir las funciones edilicias a partir del próximo 28 de junio; tarea para lo cual -explicó en conversación con Diario Talca- ya se está alistando.
¿Cómo se enfrentan estas semanas previas a asumir el cargo?
“Primero en la preparación. Leyendo bastante, interiorizándome de la situación del Concejo hasta la fecha, buscando información de algunos proyectos y conociendo departamentos municipales con los cuales podemos hacer un trabajo de colaboración para una mejor gestión. Un segundo punto es seguir ahondando en el relacionado al trabajo social (…) Creo justamente que ese trabajo fue lo que la gente premio, y no sólo en mi sino en todos aquellos candidatos que tuvieron altas votaciones. Hoy existen liderazgos en el terreno por los cuales la gente se decidió, encontrando jóvenes, independientes y otros vinculados a causas sociales, a movimientos feministas, el mundo del deporte y la cultura. Por tanto, eso es un elemento que debemos cuidar y potenciar”.
¿Se trata de caras nuevas que vienen a renovar, y que dan cuenta de un aviso que entrega la ciudadanía?
“Es una señal muy nítida y que explica que la ciudadanía está cansada y disgustada con la clase política tradicional. Hubo un castigo muy grande a los partidos políticos y creo que, con justa razón Hay situaciones que se vienen dando en el tiempo y que lo único que ha logrado es alejar a la gente de la política. (…) La gente siente legítimamente que la política ha dejado de responder a lo que ellos quieren, porque sólo se han preocupado de disputas y proyectos personales”.
¿Hablamos de un castigo transversal y no privativo de un sector político…?
“Es transversal, es amplio y muy claro. La gente no quiere más de lo mismo, está demando nuevas respuestas, pues tiene problemas nuevos. Sienten que el mundo político no conecta con sus realidades, porque éste no es parte de esa realidad (…) También hay un voto de castigo a esa política antigua que pretende acallar las problemáticas con prácticas anquilosadas y añejas, que no se hacen cargo del tema de fondo; siendo que es de sentido común darse cuenta que aspectos esenciales como los referidos al trabajo, seguridad o transparencia de la actividad pública, no han sido abordados”.
¿Y Chile Vamos también equivocó el camino?
Sin duda hubo un castigo muy grande al sector al cual yo represento y que tiene fundamentaciones súper evidentes. Hay que asumir una derrota muy fuerte, cimentada en que ésta es una coalición que no ha sido capaz de dar gobernabilidad al país (…) El castigo electoral fue muy severo. Más allá de lamentarnos, hay que asumir la crisis y la profunda crítica de la gente; y desde eso volver a construir”.
Con ese escenario político revuelto ¿crees que existen altas expectativas de este Concejo Municipal pronto a asumir?
“Miro con optimismo esas expectativas de las personas en cuanto a la conformación del nuevo concejo. He conversado con algunos concejales electos y si bien existe una visión muy diversa en el pensamiento político, también he percibido las ganas de jugarse la opción de llegar a acuerdos. Más allá de las diferencias ideológicas la gente nos demanda llegar a acuerdos y que lleguemos a consenso en estos de los mínimos comunes a nivel local (…) La gente espera que nos pongamos de acuerdo y a partir de ello poder avanzar”.
¿Y esta pluralidad que hoy presenta el concejo, será un punto a favor en esta gestión?
“Quiero ser optimista y quiero pensar que esa diversidad contribuirá a la gestión municipal y al fortalecimiento de la política en Talca. No tengo dudas que, si sabemos conducir esa multiplicidad, a través de acuerdos, colaboración y sin confrontación; sin duda puede ser un aporte significativo para la ciudad en su conjunto (…) Aunque pensemos muy distinto la sociedad, no me restaré a conversar con nadie”.
Y personalmente ¿en qué temáticas pretendes priorizar tu labor edilicia?
“Me interesa cumplir cabalmente con las funciones que la ley nos mandata, es decir normar, resolver y fiscalizar. Pero también marcar un sello social, que, si bien no está impreso en lo formal, si tiene que ver con no perder la conexión con los territorios (…) Tenemos una ciudad que ha crecido en muchos aspectos, pero que también tiene deudas pendientes. Lo esencial es levantar esas problemáticas y demandas desde los propios barrios y sus organizaciones, para luego ponerlas en relieve en el Concejo Municipal”.
¿Dialogar, consensuar y convocar parecen ser claves en esta nueva gestión?
“Absolutamente. Son tres elementos que en política debemos implementar siempre, y eso debe realizarse en sincronía con el territorio (…) Ahora, más allá de pensar que sector político es mayoría, lo más importante es hacer cómo eso se vuelca a los acuerdos, al entendimiento y a la colaboración”.
¿Qué le ofrece Erwin Castillo a la comunidad talquina?
“Ofrezco trabajo, trabajo y trabajo. La gente me verá en terreno, presente e informando. Mi esfuerzo lo focalizaré en ser un agente que aporte y no destruya, porque avanzar en proyectos u obras, es una buena noticia para toda la ciudad; no sólo para el alcalde o los concejales”.