¿Cuál es el contexto?
El próximo domingo 24 de noviembre, se realizarán en 11 de las 16 regiones del país, la segunda vuelta para gobernadores regionales, ya que como indica la ley, en estas áreas territoriales ningún candidato logró superar el 40% de los votos en los últimos comicios.
¿Cuál es la hipótesis?
Al respecto, el académico e investigador del Centro de Análisis Político de la Universidad de Talca, Mario Herrera, explicó que “normalmente tenemos como máxima, que en las primeras vueltas los votos se van hacia los extremos y, en las segundas se van hacia el centro, buscando ese votante moderado”.
“Esto explica la mayoría de las elecciones presidenciales de este periodo y también la última elección de gobernadores, pero en esta ocasión estamos en un escenario que es completamente distinto, ya que se presentaron candidatos de extrema izquierda y derecha, que también dificultaron la chance de que ganara algún candidato en primera vuelta”, detalló.
¿Cuál es la estrategia más acertada?
En este escenario, de cara al balotaje, explicó el analista político de la UTalca, “provocará una tensión en los candidatos, ya que tendrán que rescatar el voto de dichos extremos y, a la vez, tienen que crecer hacia el votante moderado, porque si se van hacia los extremos, evidentemente estarán perdiendo el centro político”.
El académico resaltó que esta elección programada para el 24 de noviembre es “sumamente relevante porque después de la elección presidencial, esta es la autoridad política que se elige con más votos a nivel nacional. Además, el Gobernador Regional es el encargado de llevar esta estrategia del nivel central al escenario regional, implementando ciertos recursos con una mirada más amplia que los municipios”.
¿Cuál es la expectativa política?
En ese sentido, estos comicios “proyectan de alguna forma la carrera presidencial, porque quien salga electo, va a representar a los candidatos presidenciales dentro del territorio y será el que lo acompañe dentro de las giras de la campaña”, indicó.
Junto con lo anterior, el investigador agregó que “en un escenario de alta fragmentación, polarización y oferta de candidatos, lo que podemos encontrar, es que algunos de ellos quedarán muy bien perfilados para la elección de diputados o senadores del próximo año».
