Es sabido en el fútbol, que los buenos equipos son aquellos que cuentan con un plantel generoso en cantidad y calidad técnica. Equipos en donde existe un once titular muy competitivo pero cuando se necesita reemplazar a algunos de ellos, el que entra juega tan bien como el que sale. Así mismo, a buen nivel se usa que el técnico tenga dos jugadores por posición, con lo cual se garantiza tener la tranquilidad de contar con especialistas en cada puesto.
Por el contrario , que ocurre en los equipos amateur ?…como se las arreglan los técnicos cuando no tienen todo lo que necesitan ?. Estas preguntas son importantes porque es justamente con lo que conviven muchos equipos cada semana. Un director técnico aplicado debería entender que para ser competitivo cada semana, debe contar en sus filas por lo menos con 4 o 5 jugadores que le garanticen tener armonía y buen fútbol en defensa, medio campo y delantera. Osea, una columna vertebral en donde estos hombres iluminen y ordenen las ideas de juego para el resto del equipo.
Ordenar un equipo así resulta muy útil ya que no habrían zonas débiles y por lo mismo no se darían ventajas tácticas al rival. Es esta columna vertebral la que hace fuerte o débil a un equipo. Tener un arquero, un defensa central, un mediocampista y delantero de buen nivel nos dará mejores opciones y también la tranquilidad de tener una línea de juego aceptable para competir y enfrentar cada partido con más posibilidades de éxito deportivo.
Ricardo Moya Sánchez
Profesor de Educación Cívica
Licenciado en Educación
Técnico de fútbol amateur