Ya estamos con incendios vegetacionales o rurales en el país (hace pocos días Conaf indicaba que al menos 40 incendios ya se habían producido en pleno invierno) y todo hace presagiar que, en la temporada de verano, la situación podría llegar a ser catastrófica, sino logramos internalizar con toda la potencia necesaria, la gestión preventiva.
En este contexto, también se ha dicho en todas direcciones que el 99% de estos incendios, son causados por las personas, ya sea por error, negligencia o intencionalidad.
Pero ¿quiénes son esas personas? Lo más común es que se hace una asociación con los turistas o veraneantes, solo porque los incendios ocurren en el verano. Esto es verdad, pero en una mínima proporción, pues los veraneantes solo explican entre un 3% a un 5 % de la ocurrencia. Entonces ¿quién? Sobre un 80% de la ocurrencia de incendios la explica la gente que vive o trabaja en el sector rural o zonas urbanas muy relacionadas con los incendios.
Aquí entonces hace mucho sentido un informe muy reciente del INE que cuantifica a la gente que vive en las zonas de alta ocurrencia de incendios y determina que, al menos, un millón y medio de personas viven en comunas relacionadas con incendios. En el estudio se indica: “en total, se identificaron 1.543.356 habitantes viviendo en zonas urbanas que se encuentran expuestos a alta recurrencia de incendios forestales”.
De 82 comunas analizadas, 9 de ellas tienen a más de la mitad de su población expuesta a incendios forestales: Penco (91,9%), Tomé (75,3%), Maule (66,6%), San Antonio (59,7%), Villa Alemana (56,9%), Quilpué (54,8%), San Pedro de La Paz (54,5%), Lota (51,9%) y Limache (50,4%).
En términos de número de habitantes expuestos a incendios forestales, las comunas de Valparaíso y Viña del Mar son las que tienen mayor población en riesgo, 134.548 y 106.194, personas, respectivamente
El mismo informe, indica un dato muy relevante respecto al riesgo que está expuesto el equipamiento de esas ciudades, indicando que, de un total de 8.473 equipamientos críticos ubicados en comunas con zonas de alta recurrencia a incendios forestales, el 13,6% está lugares de riesgo, contabilizando 935 equipamientos de educación, 136 de salud y 83 de seguridad y gobierno local.
A esto se suma que 23 comunas tienen más del 50% de su equipamiento crítico o estratégico en zonas de alta recurrencia a incendios forestales. Entre las principales están Penco, Maule, Limache, Tomé, Quillota, La Cruz, San Pedro de la Paz, Coronel y Calera.
A nivel comunal, Penco, Tomé, San Pedro de la Paz, Maule, Coronel y Quillota, tienen más del 40% de sus equipamientos educacionales en zonas de mayor recurrencia de incendios forestales.
Lo indicado es una información sumamente potente y debe ser considerada, desde el punto de vista del ordenamiento territorial, pero fundamentalmente desde el enfoque de la prevención, es decir apuntar a definitivamente no tener incendios, lo que es mucho más eficiente y eficaz, teniendo como dato central que los incendios, los generan las personas.