Mario Torres Salgado, presidente de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Talca, reelecto en julio pasado para un segundo periodo, es cuidadoso a la hora de opinar sobre el proceso que llevó a la elaboración del texto de una nueva constitución, iniciativa que, sabemos, concluyó con el triunfo del rechazo el pasado 4 de septiembre. Porque, si bien se trata de una entidad de relevante representación ciudadana, era evidente que cada junta de vecinos, e incluso cada vecino, tenía su preferencia. Y eso, recalca, se respeta. Entonces, no hubo una postura única de cara al texto propuesto por la convención. Sin embargo, Torres se atreve a analizar el resultado y comentar algunos puntos relevantes del texto relacionados al quehacer de las juntas de vecinos.
Torres tiene 65 años y es jubilado de la PDI, donde fue prefecto. Fueron 31 años de servicio. Es presidente, además, de la Junta de Vecinos Parque Los Aromos, ubicada en la 16 Oriente con 6 Norte. “También estuve en la Unión Comunal de Padres y Apoderados de Talca, porque uno va a las actividades y da una visión, opinaba… qué quiero, qué pienso…y de repente empiezan a elegirme en los cargos”, explica sobre cómo se incorporó al mundo dirigencial.
Admite que, como en toda organización, pueden haber problemas. “En algunas (juntas de vecinos), no todas, hay problemas, porque los dirigentes son hechos en el diario vivir, entonces falta un poco de capacitación (…) Yo creo que aquí todos actuamos de buena fe, en ese aspecto uno trata de que se ordene un poquito lo que es dirigencial, y el contacto con las autoridades que es lo más importante, porque nosotros nos debemos a las autoridades que están en el país, sean del color que sean, ellos son representantes de la ciudadanía y hay que trabajar con ellos”.
En Talca deben haber cerca de 214 juntas de vecinos, señala Mario Torres. Pero activas y representadas en la Unión Comunal hay poco más de 100. Algunas, explica el dirigente, después que cumplieron ciertos objetivos, no se reactivaron. Por ejemplo, acota, “en el centro, el edificio San Francisco…Plaza de Armas, Mercado Central, Barrio Estación…todo el centro, desapareció la junta de vecinos, cuando lograron sus objetivos, seguramente, y después ya no les interesó seguir…”.
Qué raro, porque el centro de Talca justamente es un sector con bastantes problemáticas…
“Yo le pongo un ejemplo… post estallido social, como quedó destruida la Uno Sur, nosotros como Unión Comunal presentamos un proyecto, pero venía del Serviu, para reparar eso, y nosotros fuimos la contraparte…y se reparó el centro de Talca…”.
Y eso no le habla a usted de un problema de participación…
“Hay poca participación… y la gente solamente participa cuando (…) dice qué gano yo…si la gente tiene esa mentalidad hoy día, si yo participo en esto qué gano, si aquí ser dirigente no es rentable porque no le pagan a uno, es solamente servicio público, al que no le guste tiene que aceptarlo, sino para qué se mete en esto…entonces hay mucha gente que no tiene esa vocación de servicio público, nada más…”.
Durante el proceso que vivimos para tener una nueva constitución se ha valorado la participación ciudadana como algo indispensable…¿Cómo lo ve usted desde su cargo en la Unión Comunal…? ¿Parece que igual cuesta que la gente participe?
“Efectivamente, la gente no participa, está cómoda, porque el sistema le permite estar cómoda, es como que usted levanta una bandera de lucha porque hay una antena de telecomunicaciones que no le gusta, pero nadie quiere soltar el teléfono (…) También se ha visto mucha violencia, no hay acuerdo (…) Yo digo siempre que la responsabilidad es de los políticos, porque ellos nunca se pusieron de acuerdo, y llegamos a un estallido social (…) porque los políticos no fueron capaces de solucionar los problemas (…) El otro día vimos que le pegaron a un parlamentario, un diputado de aquí de nuestra región. Y qué hablar de violencia, cómo vamos a controlar la delincuencia, si la violencia está en los que tienen que poner los paños fríos, en dar ejemplo (…) El daño que le hacen a este país es polarizar a la gente, claro, puedo tener razón o no puedo tener razón, pero podemos conversarlo, yo creo que ese es el tema. No hay conversación…”.
En el inicio del proceso constituyente, entiendo que se realizaron cabildos en la Unión Comunal. ¿Qué temas salieron como preocupación ciudadana en esas reuniones?
“Se habló primero qué era la constitución porque mucha gente…el 80 por ciento no sabía lo que es la constitución (…) algunos escucharon hablar de la constitución ahora, que es la ley madre que tenemos nosotros…¿Qué paso con eso? Que empezaron los cabildos a informar, y uno lo encontraba interesante porque se informaba (…) Y después cuales eran las alternativas que la gente quería, porque una cosa es lo que quiera el legislador y otra lo que quiera la comunidad. Aquí se plantearon muchos temas que eran muy importantes, por ejemplo, la seguridad era un tema transversal, el agua era un tema, la vivienda era un tema, la educación era un tema, y la economía obviamente, que todos quieren tener mejores sueldos y así podían tener una buena pensión, eso era lo que transversalmente la gente discutía todo el tiempo…”.
Ya en la etapa de aprobar el texto de la propuesta de nueva constitución cada Junta de Vecinos tenía su postura…¿fue difícil visto desde la Unión Comunal ese proceso?
“Los dirigentes cada uno tenía su opinión respecto a eso…y en eso como Unión Comunal estaba abierto el abanico para que cada uno opinara y resolviera lo que estimara pertinente. Sí como Unión Comunal, que yo lo dije, el artículo 210 a mí no me gustó para nada porque hoy una unidad vecinal comprende un sector grande donde puede haber 20, 30 o 10 juntas de vecinos…y esta constitución dispuso que hubiera una junta de vecinos por unidad vecinal. Yo (…) encontré que era una aberración, primero porque es un territorio muy grande, nosotros somos dirigentes de las necesidades de cada comunidad porque la villa o población de al lado tiene otras necesidades. Entonces, nosotros no podíamos mandar un territorio grande, íbamos a ser como pequeñas municipalidades, se iba a poner en jaque el dirigente social (…) iban a venir maquinarias, no sé de dónde, llámese política, social, para instalarse en un territorio y tener su cuota de poder, y luchar contra el poder constitutivo, tanto de gobierno como municipal. Yo encontré que eso es una aberración porque los dirigentes nos debemos a lo que necesita la comunidad (…)”.
Muchas voces señalaron que con la nueva constitución se cambiaba la forma en que la comunidad o las comunidades ciudadanas se relacionan con el poder, con las autoridades, después de perder muchas de sus capacidades organizativas durante la dictadura y con la implantación del modelo neoliberal…
“Si estamos hablando de una dictadura obviamente que se vulneran algunas garantías o algunos derechos de los ciudadanos, y hay muchos comentarios que el sistema neoliberal…que sí, es perverso tal vez, porque si usted reclama como ciudadano por un problema no tiene ninguna defensa (…) Yo habría puesto el eje central de la constitución en la persona humana. No lo que se puso aquí. Si se hubiera puesto en el primer nivel o en la primera fila a la persona la constitución es otra (…) Respecto a la ciudadanía, hay que preguntar…el año pasado participé en el proyecto de la cárcel, el centro cívico…habían profesionales de todas partes del mundo, y yo era un ciudadano más, pero yo me conozco la ciudad (…) También recuerdo que participé como dirigente cuando se hizo un estudio de seguridad de Talca, hace como tres años atrás (…) Yo conozco la realidad de mi ciudad y quiero que se trabaje por la ciudad que nosotros los talquinos queremos, no la que nos imponen…”.
Pero para eso se requiere que la comunidad participe…
“Sí, pero las instancias son muy pocas, hay muy pocas instancias para la comunidad, y en algunas cosas estamos para el café y la galleta, traen la sandía calada…entonces no hay esa participación…Nosotros hicimos con Surmaule un trabajo que nos sentamos e hicimos cosas…cosas que fueron muy rupturistas de repente…construimos un parque detrás de la Faustino González, donde con la tierra que se sacaba se hacía un montículo, que no estaba muy de acuerdo en un principio con el arquitecto que nosotros teníamos, pero después los niños corrían y andaban arriba…entonces usted se da cuenta que eso es más importante que hacer otras cosas. Ahí es cuando uno dice la participación de la gente es súper importante. (…)”.
En esta nueva etapa del proceso constitucional que se está conversando, la Unión Comunal está interesada en dar a conocer sus ideas…
“Lo que pasó es que la Unión Comunal en donde están los dirigentes de las juntas de vecinos, participó en el inicio de la constitución y cuando vino el proceso nunca nos preguntaron a nosotros, nunca vinieron los constituyentes a decir queremos conocer la realidad, nunca vinieron. Entonces los dirigentes quedamos a la deriva, dividir para gobernar (…) Nosotros habíamos propuesto muchos temas (…)”.
El actual proceso que se está conversando es una nueva oportunidad…ustedes, insisto, como Unión Comunal, promueven, o están interesados en que ahora sí se les considere en la propuesta…
“Tenemos que ser consultados, pero no solamente nosotros, tiene que estar la comunidad, toda, no solamente las juntas de vecinos. Nosotros representamos una parte de la comunidad, pero tienen que estar autoridades que estén representadas que den su visión y que la recojan, porque no sacamos nada con hacer cosas, reuniones, sino no nos recogen, porque ya tienen la idea preconcebida de algo. Para eso está el parlamento, para parlamentar (…) Aunque no estemos de acuerdo con los políticos, son necesarios porque ahí se puede conversar, no podemos tener una idea tan fija, porque yo puedo tener una idea y no es viable, pero quiero que me la recojan, sí, hay posibilidades…hoy día si usted ve en las encuestas la primera cosa es la seguridad ciudadana, o sea, la delincuencia, la seguridad del país, eso es…migración, otro temazo, otro temazo es la economía, que los precios están subiendo… control de los precios…no sé cómo será eso, no soy economista…pero hoy día esos son los temas…”.
Mencionó el artículo 210…ese artículo no debería ir entonces en la nueva constitución…
“Hay una ley que regula todo eso….para qué está ahí (el artículo), no sé quién lo inventó, a quién se le ocurrió y lo puso…porque no conoce la realidad, yo estoy hablando de Talca…Imagínese en Santiago…hay comunas tremendas como Maipú…vamos a tener como cuatro juntas de vecinos…entonces qué se pretende con eso…no sé…porque cada comunidad trabaja con sus problemas…”.
¿Qué hace falta entonces para una mejor relación entre las autoridades, ya sea de Gobierno o municipal, y las juntas de vecinos…? ¿Se podría eso poner más claro en la constitución?
“Me defrauda eso…porque en la constitución que se quería dar…estoy hablando de los territorios, que es el tema que a mí me interesa…se puso que se iba a elegir un representante que iba a ser como un parlamento chiquito en cada región, iba a ser como una cámara en cada región…eso estaba propuesto, eliminando el senado, se elegía a los candidatos como regionales…que está bien la regionalización…pero si usted lee el artículo dice claramente en el renglón final que ellos no podrán fiscalizar las instituciones que son públicas o del Estado, o sea…para qué los queremos…esos supuestos senadores regionales no tenían poder fiscalizador de las instituciones del Estado…para qué los queremos entonces, pregunto yo…”.
Qué piensa sobre la forma en que se debe continuar el proceso constituyente…
“Los políticos no pueden llevarse la constitución…es importante que estén, pero ellos no se la pueden llevar…porque la gente no votó por los políticos…ellos no lo hicieron bien…me gustaría que lo hicieran bien, nada más…Pero también la ciudadanía tiene que participar…y los que participen ojalá los chilenos sepamos elegir…porque no vamos a elegir gente que fue payaso, Rojas Vade, la Picachú (…) Tenemos que sacar la soberbia, porque esto no es un gobierno, un gobierno dura cuatro años (…) pero la constitución rige a los de izquierda y a los de derecha…los pobres, los ricos, los va a regir a todos…es otras cosa, apartada de la política…”.
¿Qué sentimiento tiene usted respecto al futuro…? ¿Seremos capaces de llegar a acuerdos, de superar el ambiente enrarecido que predomina en la actualidad…y ver que se trata de un proyecto país…?
“La esperanza tiene que estar siempre, creo que estamos pasando una generación de ciudadanos y políticos que no vamos a superar eso, porque hay heridas que están quedando, con esto de la constitución quedaron heridas en el camino, quedaron heridos, entonces yo tengo fe que a futuro, si hacemos una buena constitución podemos dar un salto de aquí a diez o quince años más, de que tengamos políticos que puedan dialogar más (…) Cada uno puede tener su idea, pero pensemos en el país que tenemos…no nos farreemos este país. Porque nos estamos farreando este país. Históricamente con el tiempo vemos los vacíos que se producen. Yo tengo fe que este proceso se haga con altura de miras, por el bien del país, sin mentes afiebradas, que esté todo el abanico representado, pero también la constitución la tiene que hacer gente que sepa un poco (…) Si logramos tener una constitución que nos represente a todos, de cualquier índole política, social…yo creo que eso es lo que esperan los chilenos…no esperan otra cosa…y tampoco creo que vamos a superar esto en el mediano plazo, va a ser a largo plazo. Pero hay que superarlo. Y algunos interlocutores que tenemos ahora no representan eso, no hay consenso, no hay ideas…cómo no van a haber ideas buenas de uno y otro lado…”.
Es paradójico, porque con esta nueva generación que llegó al poder, gente joven, se tenía esa esperanza, que con ideas renovadas se podía llegar a una nueva forma de entender la política…pero al parecer cuesta mucho…
“Uno tenía esperanza de que los jóvenes podían cambiar este país…pero esta generación no lo va a cambiar…esta generación que está ahora no lo va a cambiar, porque está polarizada, ese es el problema…la generación joven está más complicada que la más antigua…porque hay que sumar un poquito de experiencia…en todo orden de cosa…no porque un médico salga recién…con toda la tecnología y con todos los conocimientos nuevos, va a ser mejor que el médico antiguo (…) Creo que aquí faltó mesura (…) la juventud no dio el ancho no más…no estaban preparados…”.