¿Qué le parecen los resultados del índice de calidad de vida urbana respecto a Talca?
«Me parece que reflejan que en Curicó y Linares han sido más inteligentes que nosotros en Talca. porque han abierto la ciudad al buen desplazamiento de las personas, aunque igual están colapsados».
¿Y qué pasa en Talca?
«En Talca vivimos como en un globo que se está inflando con una presión muy grande. porque la conectividad interior de la ciudad es impresionantemente de mala calidad».
¿En qué se refleja?
«Uno hoy transita por calle 1 Norte en taxi colectivo y la competencia es impresionante. Están a punto de pelearse a patadas por lso pasajeros. Esto se debe al grave colapso vial».
¿Por qué ocurrió?
«Esto se debe a que Talca creció en forma inorgánica producto de la expansión urbana. Ahora estamos pagando los costos y, lamentablemente, el Estado va a tener que hacerse cargo de arreglar esta situación, porque los privados fueron los que generaron esta problemática».
¿En qué se refleja a nivel de barrios?
«En Talca se ve que hay barrios muy buenos, como en Las Rastras o Bicentenario, pero otros están empobrecidos y encapsulados. En Carlos Trupp hay tres poblaciones nuevas que no tienen salidas viales para que la gente salga a su trabajo».
¿Qué proyectos pueden ayudar y están pendientes?
«El par vial de 6 y 8 Sur puede ser una solución, pero se han demorado dos años. Todo esto empeora la calidad de vida de los habitantes de Talca».
¿Y cómo hacerse cargo?
«Tenemos que generar un anillo de conectividad exterior de Talca y no tenemos otra opción. La mirada tiene que ser hacia el futuro. Para ello, estamos llamando a repensar las ciudades. Ese es el desafío».
¿Qué ocurre con los barrios patrimoniales o el casco histórico de Talca?
«Están claramente abandonados y el índice así lo refleja. Necesitamos una política pública para abordar estos temas».